Capítulo 5: El llanto en el pasillo
Cada día Mary salía al jardín. El aire fresco del páramo la ayudaba mucho. Ahora comía todo su desayuno. "Tienes más hambre," dijo Martha. "Es el aire del páramo."
Un día, Mary vio al petirrojo otra vez. El pájaro saltaba por la pared del jardín secreto. Mary lo siguió y corrió detrás de él. "¡Me gustas mucho!" le gritó al pájaro.
Mary buscó una puerta en la pared, pero no encontró nada. "Es muy extraño," pensó. "Tiene que haber una puerta."
Por la noche, Mary preguntó: "¿Por qué odia el señor Craven ese jardín?"
Martha explicó: "Era el jardín de su esposa. Ella murió allí hace diez años. Se cayó de un árbol. Por eso él cerró el jardín para siempre."
Entonces Mary oyó un sonido extraño. Era como un niño llorando.
"¿Oyes eso?" preguntó Mary.
"Es el viento," respondió Martha rápidamente.